En estos momentos, la banda sonora de mis días está siendo el disco de 2009 Equilibrio Inestable, primer proyecto en solitario de Igor Paskual. Pero antes de hablar de este fantástico disco es conveniente conocer un poco más sobre este brillante músico.
Inicios en Babylon Chat
Igor Paskual (el primero por la derecha en la foto) es uno de los actuales guitarristas de Loquillo, además de coautor/autor de algunos de los temas de los últimos discos de “El Loco”. La historia musical a nivel profesional de Igor Paskual comienza con Babylon Chat, grupo ovetense de Glam Rock influido por artistas como Marc Bolan & T-Rex, Kiss, Bowie, Johnny Thunders o los New York Dolls. En Babylon Chat Paskual era el guitarrista y cantante. Como legado, dejó algunas maquetas y singles, además de dos irregulares discos de estudio, Hotel Adicción, de 2000, y Bailando con Brando, de 2001, hoy casi imposibles de encontrar en formato físico. Después de la salida de Paskual, Babylon Chat continúo con su andadura.
Igor Paskual y Loquillo
La relación con Loquillo, en palabras del propio Paskual, empezó de la siguiente manera:
“El Loco escuchó nuestro disco Hotel Adicción y nos llamó para invitarnos de teloneros a su concierto de Madrid. Se lió una buena con su público (ndr: concretamente, el bueno de Igor les dijo a los espectadores del concierto: me voy a follar a vuestras novias, cosa que a Loquillo le encantó, queriendo incorporarlo a su banda de inmediato) y nos volvió a requerir para hacer más conciertos conjuntos. A partir de ahí, nos fuimos conociendo, le ofrecimos cantar un tema para el disco Bailando con Brando, Viciosa (ndr: versión de la canción Vicious de Lou Reed) era el tema, y comenzamos a hacer canciones a medias. Fue muy poco a poco. Íbamos viendo que teníamos muchas cosas en común, y además era un momento raro para ambos, estábamos buscando un camino a seguir y establecimos una gran complicidad. Cuando Ricard se fue de los Trogloditas me ofreció el puesto a mí. También me llevaba genial con Jordi Vila, coincidíamos en muchos gustos y sé que él también insistió bastante para que el Loco me metiese en la banda. Obviamente, no me lo esperaba. En ese momento no fue nada fácil decidirme, porque yo sentía que había terminado un ciclo con mi banda, pero llevábamos muchos años juntos y no quería tomar esa dolorosa decisión. Pero siendo sinceros, también sentía que tenía mucho que ofrecer y que ese era el sitio adecuado. También me notaba estancado, sin estímulos y necesitaba gente que me enseñase algo más, y nadie mejor que el Loco por supuesto.”
En el disco de Loquillo y Trogloditas Arte y Ensayo, de 2004, Paskual es coautor de los temas Arte y Ensayo, Rock’ n’ Roll Actitud, El Hijo de Nadie, Malas Compañías, Restos de Serie y de la adaptación al castellano de la conocida canción de Sonny Curtis I Fought the Law, rebautizada en castellano como Luché Contra la Ley, interpretada también por Fito Cabrales en alguna ocasión. En el disco Balmoral, de 2009, es coautor de los temas Memoria de Jóvenes Airados, Hotel Palafox y La Belle Dame Sans Merci, además de autor del tema Canción del Valor.
Tras los discos Arte y Ensayo y Balmoral, Paskual declina la invitación de Loquillo de acompañarle en el disco Su Nombre Era el de Todas las Mujeres, basado en poemas de Luis Alberto de Cuenca, centrándose en su disco en solitario. Loquillo le dice que sigue teniendo un hueco en su banda, así que vuelve para la grabación de La Nave de los Locos, que verá la luz el próximo 23 de octubre, y del que ya está disponible en forma de adelanto la canción Contento.
Equilibrio Inestable
Con respecto al disco en solitario de Igor Paskual, Equilibrio Inestable, de 2009, es un disco fantástico, situándose entre los mejores discos de rock español publicados entre los años 2000 y 2010, casi nada.
Lo que más me gusta del disco es que el título no se ha elegido al azar. Encontramos un equilibrio inestable en todas y cada una de sus canciones, en las que encontramos una mezcla del rock más macarra y crudo con pasajes más suaves y líricos. Nos hallamos, pues, ante un disco de contrastes, de esos que si escuchas mientras conduces te harán no querer llegar nunca a tu destino, de esos que cuando se acaban te da rabia y no tienes otra opción que volver a escucharlos.
Como no todo iban a ser cosas buenas, creo que al disco le sobran dos canciones que no tienen absolutamente nada que ver con la temática general y parece que se han metido de relleno. Me refiero a los temas El Peor Novio del Mundo y Automedicación, que sin ser malos temas desentonan bastante. Lástima, porque de no ser por esto el disco sería para ponerle un rotundo 10.
Obviando las dos canciones citadas anteriormente, el disco tiene temas que son una auténtica maravilla, así que vamos por orden:
Música para Traicionar: Rock and Roll de toda la vida, con un tono chulesco y actual y unos riffs que te dejan enganchado desde la primera escucha. Se han cansado, los héroes de esperar, de cuidar de tí, y decidir por tí, y de traer la esperanza hasta aquí, porque, suena música para traicionar, para decir adiós y dispararte al corazón. Ante semejante letra lo único que uno puede hacer es rendirse a la evidencia de que Paskual empieza saliéndose.
Pierdo la Calma: canción algo biográfica acerca de los malos hábitos y del peligroso hábito de considerarse un perdedor. Más tranquilita que la primera. La inocencia no es buena consejera, lo mejor es no perder la paciencia.
Chica de Gama Alta: uno de los mejores cortes del disco, con un toque a lo Kiss que me encanta, unas palmas al más puro estilo glam y unos riffs que te dejan sin aire. El universo de las chicas y de las relaciones: No hay nadie que me haga vibrar, nadie como tú. Por mi cama han pasado ya cientos, y nadie como tú…
Bebemos: para mí es sin duda la mejor canción del disco. Canción lenta con un marcado poso de amargor, y con el alcohol y sus consecuencias en las relaciones humanas como tema principal. Somos bastante cobardes si no hemos bebido, sólo nos atrevemos si probamos el vino, o mi estrofa favorita: Si tomas lo suficiente, sientes que nadie te miente, y si tomas toda la botella, no piensas en él, y no piensas en ella. Demoledora.
Volver: medio tiempo semiacústico y con bastante ritmo sobre la vida en la carretera y sus consecuencias, con la soledad y la añoranza del hogar como temas principales. Me quedo con la mandolina que suena de fondo. Igual que mis amigos, que siento que los pierdo, no los cuido, aunque los quiero, ¿por qué nunca estoy?
Bipolar: medio tiempo que va cogiendo fuerza hasta explotar justo en mitad de la canción, convirtiéndose en un canto desesperado. Buena elección de título. Si primero dices, sí amor, y luego dices, no ¡por Dios!. De nuevo nos encontramos ante unos riffs que hipnotizan.
La Bahía: de nuevo los riffs cobran protagonismo en esta canción chuleta y desenfadada sobre los tópicos del amor y de las primeras citas. Dice escucha sin prisa, atiende a su risa, descubre el latido de su corazón. Para algunos será rebajarse pero para otros, entre los que me incluyo, es la esencia de estar con una mujer, además de otros placeres carnales.
Mis Amigos: otra canción de puro rock donde cobran protagonismo los tiempos duros en los que vivimos y la amistad. Destaca la parte cantada en inglés al más puro estilo glam de los 70. Canto al individualismo y la elegancia: Mis amigos tampoco tienen un duro, pero ninguno pierde las buenas maneras, el buen gusto, la clase o la elegancia, viven como dandys, en duras circunstancias.
El Peor Novio del Mundo: sin comentarios, canción que no le pega al disco.
Mi Funeral: canción floja sobre el manido tópico de qué pasará cuándo me muera.
Automedicación: si queréis aprender nombres de sustancias psicotrópicas a ritmo de una mezcla de blues y psicodelia esta es vuestra canción.
Corazón de Hielo: Las horas se han cansado de verme en silencio, tejiendo cada noche una lluvia de asfalto. Para mí con estos dos versos a ritmo de piano y guitarra acústica la canción está salvada. El resto, un fantástico medio tiempo que va subiendo en intensidad a medida que la canción avanza.
En definitiva, estamos ante un disco que os recomendaría escuchar despacio y sin prisa alguna. Como todos los buenos discos, es complicado que entre a la primera escucha, pero una vez que os entre no os podréis despegar de él durante un tiempo, además de descubrir nuevos matices con cada nueva escucha. Justo ahora se acaba la última canción y empieza a sonar el Tiempos Nuevos, Tiempos Salvajes de Ilegales, ¡bendita sea la música y el iTunes!