Con una pequeña
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p>(https://www.facebook.com/madnessliveproductions) se ha dado a conocer la siguiente noticia:
”Entradas de Scorpions AGOTADAS. En menos de una semana se han acabado todas las entradas para ver la gira de despedida de los alemanes en Madrid…”
Y además acompañados de una banda que se toma a sí misma tan poco o tan en serio como Steel Panther. El concierto será una única fecha en España y se llevará a cabo en el Palacio de Vistalegre en Madrid.
Scorpions han conquistado varias cimas a lo largo de su larga e ilustre carrera: desde unos inicios más cercanos a la psicodelia y al rock progresivo, una continuidad más descaradamente rápida y directa basada en el heavy metal y, a partir de los años ’80, un estilo más cercano al hard rock. También tienen el título de “reyes de las baladas” y se los acusa de haber causado el baby boom de Francia a principios de la década de los ’80.
Scorpions también ha sido la cuna de grandes guitarristas: Michael Schenker (hermano pequeño del guitarrista Rudolf Schenker) y Uli Jon Roth han salido directos de la cantera del grupo teutón. A día de hoy, ambos han influenciado a multitud de músicos como Kirk Hammett de Metallica por citar uno de los ejemplos más famosos.
Los años no pasan en balde para nadie, ni siquiera para aquellos a quienes creemos inmortales. Scorpions se han ganado la jubilación, aunque duela reconocerlo. Me pregunto qué pasará cuando los grandes mastodontes del rock y del heavy metal empiecen a desaparecer. ¿Quién será capaz de llenar el hueco? Desde luego, el primero que lo consiga tendrá muchas, pero muchas papeletas de hacerse inmensamente rico (y de tener legiones de fans mitómanos esperándole en todas partes).
¿Cómo serán las grandes estrellas del rock del futuro? Es difícil de predecir, pero está claro que tienen que aprender mucho de las del presente.