Puede que la música que hace un grupo determinado no te guste. Puede que te parezca demasiado suave, demasiado agresiva, demasiado difusa o demasiado contundente. Eso podemos entenderlo. Puede que no compartas el mensaje que difunde cualquier banda o que directamente lo condenes, pero a pesar de todo defiendes su derecho a expresarlo. A nosotros aquí en Xombit Music también nos pasa.
Podemos entender que a muchas personas lo que hacen Soziedad Alkoholika les parezca directamente ruido. Podemos entender hasta que no comulguen directamente con el mensaje que el grupo promulga, a pesar de que dicen cosas que muchos pensamos: Fueron los primeros en este país en decir que la Navidad es un cuento consumista, de los primeros en denunciar la violencia de género antes de que fuera un tema recurrente en las noticias, de los pocos que hablaron del rechazo que sufrían los niños que tenían SIDA heredado de sus madres en los ’90, de los primeros en alzarse contra la vivisección y la experimentación brutal en animales, del problema del paro –que hace 20 años ya existía–… En definitiva, de decir muchas verdades incómodas.
Hace nueve años la Asociación de Víctimas del Terrorismo consiguió sentarlos en el banquillo de los acusados en la Audiencia Nacional por presunta apología del terrorismo. Fueron totalmente absueltos, y el Tribunal Supremo ratificó la sentencia. Fin de la historia, no hay nada más que hablar. ¿O quizá sí?
Este fin de semana, Soziedad Alkoholika iban a dar su primer concierto en Madrid después de cinco años sin pisar la capital. Por razones absurdas como “expresiones hirientes y poco afortunadas” y demás zarandajas que incomodan a quienes ocupan cargos las instituciones, se han movido los hilos necesarios para prohibir el concierto. Y lo han conseguido.
Este artículo no sólo es para reivindicar la música de los S.A. como se les conoce popularmente, sino para denunciar abiertamente la censura y la persecución que se hace a un grupo sólo por no decir cosas que a los mandamases les parezcan agradables al oído. Que la canción protesta en cualquiera de sus manifestaciones airee los trapos sucios de un país y haga a la gente pensar por sí misma debe ser algo muy peligroso, cabe pensar.
Ante esta situación, y como nosotros no tenemos ningún poder real para darle la vuelta a la tortilla, lo único que podemos hacer es poner música. Al igual que ya hemos hecho con Helloween, Hamlet o Pantera, vamos a ofrecerte una lista con lo mejor de Soziedad Alkoholika:
Ya no se trata sólo de que nos gusten más o menos, sino de que nosotros condenamos la censura y creemos en la libertad de expresión. Se trata de defender la libertad de todo el mundo, absolutamente todo el mundo, a poder decir con total franqueza lo que piensa, sin cortapisas o mordazas.
Un ataque más contra el arte y silenciando las voces que ciertas personas no quieren escuchar. Es realmente triste que en una supuesta democracia tengan que pasar estas cosas.