Los Suaves es uno de esos grupos de rock de este país con una base de seguidores altamente devota, de esas que elevan a las bandas a la inmortalidad hasta el fin de los tiempos. Nosotros hemos hablado de ellos en muchas ocasiones: Les hemos dedicado un especial, hablamos de su concierto sorpresa en Ourense y hasta hablamos de la edición en vinilo de su concierto en Londres. En Xombit Music nos gustan Los Suaves, y creo que a mí especialmente.
Los Suaves son, aunque no lo parezca, un grupo de extremos. O los amas o los odias, no hay término medio. Yo personalmente me incluyo en el primer grupo. ¿Por qué? No lo sé. Yosi desde luego no es el mejor cantante del mundo y probablemente Charli tampoco sea el mejor bajista, aunque desde luego Alberto Cereijo es uno de los mejores guitarristas nacionales. Lo que está claro es que Los Suaves tienen algo de lo que no todo el mundo puede presumir: Honesitdad a raudales, y creo que ahí radica la clave de su éxito.
Los descubrí cuando era un chavalín, y han sido una gran influencia y una gran compañía para mí a lo largo de toda mi vida. Han puesto banda sonora a momentos buenos y momentos difíciles, y hace ya un tiempo pude verlos en directo una última vez, que en esta ocasión, por desgracia, será la última de todas.
Como ya deberíais saber, Los Suaves han anunciado que se separan una vez terminen esta gira. Es una de esas situaciones que, aunque sepas que llegarán, no disminuye el mal trago cuando por fin ocurre. Me cuesta hacerme a la idea, francamente, y es que igual que me ha pasado en muchos otros casos, acabas teniendo la firme convicción de que Los Suaves son inmortales y siempre estarán ahí.
De todas formas y a modo de homenaje, en Xombit Music hemos pensado que lo mejor que podemos hacer para que siempre se les recuerde es darte una lista con sus mejores canciones, sin orden de preferencia particular, simplemente por el hecho de escuchar, disfrutar y dejarse llevar:
A pesar de que faltan unas cuantas –soy consciente, el catálogo de Spotify tristemente da para lo que da, y echo de menos haber incluido Frankenstein (Todos somos el monstruo) por poner un ejemplo–, creo que lo esencial está ahí, desde las letras sentidas de Yosi a las melodías y acordes que llevan como veinte años poniéndome los pelos de punta.
La música termina, la magia se acaba, y como ellos mismos dirían…
La noche ya se gastó / El tiempo empieza a caer / Los días están contados / Y parece que aún fue ayer…
¡Siempre Suaves!