Unos se van y otros vienen. Hace algo más de un año, Taylor Swift (quien probablemente sea la estrella más “brillante” del pop en estos tiempos) anunciaba que retiraba toda su música de Spotify, alegando que la compañía no compensaba suficientemente bien el trabajo de artistas, productores y compositores. En contraposición hoy nos hemos levantado con el anuncio por parte de AC/DC de que su música pasaba a estar disponible en los servicios de streaming Spotify, Rdio y la recién creada Apple Music.
Recordemos que AC/DC ha sido uno de los grandes detractores de las plataformas de streaming y música digital en general, aduciendo su forma de entender la música a través del concepto del álbum y no como canciones sueltas. Tan solo hace tres años que su discografía se encuentra disponible en la iTunes Store, así que con la reciente decisión, parece que la banda por fin da un paso al frente para adaptarse a los tiempos que corren.
El tiempo del consumidor
Desde Xombit Music nos alegramos enormemente de esta noticia, no tanto porque seamos más seguidores de AC/DC que de Taylor Swift –que lo somos, vaya si lo somos– sino porque somos de los que pensamos que la industria tal y como la hemos conocido siempre, ha cambiado y ya no hay vuelta atrás, a pesar de que algunos no quieran ceder su trozo del pastel.
Ya hemos dicho más de una vez, que compartimos la idea romántica que tienen los australianos del concepto de álbum, y aunque eso pueda sonar contrario a las plataformas digitales, quizás no lo sea tanto. Creemos que este es el tiempo de los consumidores y compradores de música, y no de las discográficas, en tanto que hoy en dia tenemos la oportunidad de comprar la música que realmente creemos merece la pena.
Se acabo el tiempo de gastarte 25-35 € en un disco nuevo, llegar a casa y sentirte estafado. Sentirte estafado con un par de canciones buenas que suenan en la radio y 8 de relleno. Y no nos convence ese argumento que dice ”cuando la música es gratis como en Spotify, se vende menos y es perjudicial para la música”. Quien tiene cultura de comprar música la va a comprar y quien no no, independientemente de que utilice este tipo de servicios.
Por no hablar de que gracias a este tipo de plataformas, se nos brinda la oportunidad de conocer a multitud de artistas que de otra forma no llegaríamos siquiera a percibir. En los últimos años hemos asistido a multitud de conciertos, remunerando el trabajo de dicho artista, gracias a que hemos tenido la oportunidad de escuchar su música. Incluso nos hemos hecho seguidores de ese artista y comprado sus discos.
Así pues, nos parece que servicios como Spotify o Apple Music, consiguen que la relación artista-consumidor sea más sincera. Sí, puede que algunos ganen menos dinero, pero esa diferencia seguramente se vea reflejada en altos porcentajes de oyentes disconformes con su trabajo. ¿Por qué tenemos que pagar por algo que nos gusta? Preferimos elegir quién se merece nuestro dinero.
