Aprovechando que hoy es el 51 cumpleaños de uno de mis artistas favoritos, inauguramos una sección en la que nos acercaremos a la vida y obra de nuestros guitarristas favoritos, aquellos a los que a los editores de Xombit Music nos tocan más la fibra. Porque al fin y al cabo de eso va esto de la música. No de quién tiene la mejor técnica, sino de quién te toca más la “patata”, aunque a veces las dos cosas vayan de la mano.
Thomas Baptist Morello, más conocido como Tom Morello alcanzó la fama mundial y el estatus de mito de la guitarra como miembro y compositor de la ya histórica banda de rock, Rage Against The Machine; un grupo con marcado carácter político. Y es que conocer la faceta ideológica de nuestro protagonista, es fundamental para entender la forma tan especial de entender la música, y en concreto la guitarra, que tiene Tom. El propio Morello afirma que su educación política comenzó desde el jardín de infancia, ya que el color de su piel enseguida marcó su relación con los otros niños, a pesar de tratarse de una escuela interracial.
Desde una edad bien temprana empezó a mostrarse simpatizante de ideas anarquistas y comunistas, que en una sociedad como la americana, de seguro le supuso más de un problema. Con 16 años, en unas elecciones ficticias de su instituto, llevó a cabo una campaña por un candidato anarquista. Con semejante historial, parece natural que acabara por licenciarse con honores en Ciencias Políticas en la universidad de Harvard.
Con estas premisas, no es de extrañar que fueran los Sex Pistols quienes le llevaran a la idea de trasladar dichas inquietudes a la música. Influenciado además por bandas como Black Sabbath, Kiss, The Clash o Led Zeppelin formó su primer grupo en la universidad, Electric Sheep, del que también formaba parte el guitarrista de Tool, Adam Jones. La cosa no llego a buen puerto y tras finalizar sus estudios se muda a Los Ángeles donde, después de un tiempo conocería al vocalista Zach de la Rocha y al batería Brad Wilk, con los que fundaría finalmente un grupo, tras convencer a su amigo de la infancia Tim Commerford para que se encargara del bajo. Así nace Rage Against The Machine.
Sin duda alguna precursores de lo que luego se dio en llamar Nu Metal, influenciados por otros estilos como el funk y el rap, RATM reinventaron la manera de entender el rock, y gran parte de culpa la tiene nuestro homenajeado y su forma de tratar la guitarra. Capaz de recrear el scratching de los Dj’s con su “Arm the Homeless” y de hacer que encajaran los pesados riffs propios del heavy metal con los melodiosos riffs del funk, supo además que todo casara a la perfección con su peculiar manera de aplicar los efectos.
La página web de Gibson recoge los que para ellos son los 10 mejores momentos de la discografía de Morello, lista que encabeza el que seguramente es el tema más conocido de RATM, Killing in the Name. En él Tom ”interpreta un solo clásico, construido alrededor del por entonces novedoso pedal Whammy. Fue una de las primeras grabaciones que incluían ese pedal y marco la pauta de cómo se utilizaría en las siguientes dos décadas”.
Esta canción es además un gran ejemplo de la singular manera de lidiar con las seis cuerdas que tiene en general el músico, alejándose de estructuras y cánones más clásicos. Este mismo solo que comentábamos antes, fue elegido por la revista NME como el número 4 de entre los 50 mejores solos de la historia. Sin embargo la revista Guitar World realizó una encuesta entre sus lectores que sitúa a este en el número 89 de su top 100. Fue el solo de Bulls in Parade el que se llevó mejor nota entre los asiduos de la prestigiosa revista, alcanzando el puesto 23. Y es que esto de las listas es obviamente muy subjetivo, pero no cabe duda de que ambos son una buena muestra del producto que ofrece Morello.
Puestos a dejar de lado la objetividad y hablando de gustos personales, quien firma este artículo nunca tuvo especial feeling con el señor Zack de la Rocha , a pesar de reconocer su impacto e importancia dentro de uno de los grupos más importantes en la historia del rock, por la influencia que han tenido en las siguientes generaciones. Así que cuando RATM se separó en en año 2000 y Morello, Wilk y Commerford reclutaron a uno de mis cantantes favoritos, Chris Cornell para formar Audioslave, imagínense lo saltos de alegría.
A este periodo pertenece mi momento favorito del guitarrista, que no es otro que el solo en la parte final de Like a Stone. Un ejemplo de que la velocidad y el virtuosismo no lo son todo. Hay que transmitir algo, y Tom lo consigue con un acertadísimo y único uso de los efectos en un difícil a la par que sencillo regalo.
Esta es una pequeña muestra de lo que es capaz de realizar nuestro héroe del día, del cual tenemos la suerte de poder disfrutar como contemporáneos. Ya no podemos disfrutar de genios como Hendrix, así que aprovechémonos de la fortuna que supone poder ver en directo a este guitarrista. No obstante, no queremos finalizar sin recomendaros que estéis abiertos a cualquier proyecto en el que participe Morello, como por ejemplo Street Sweeper Social Club o The Nightwatchman a los que también merece la pena que les prestéis atención. Esperamos que hayáis disfrutado con nuestro particular homenaje al guitarrista y no dudéis en dejarnos vuestras opiniones en los comentarios.
